El salón de expresidentes de la asamblea legistaliva ha servido para todo y para todos:
Presentación de libros de la izquierda
Bailes con Marfil organizados por las diputadas de la Comisión de la Mujer (No me pregunten la relación)
Diatribas ecologistas contra los transgénicos
Presentación de proyectos a favor de los gays
El memorial de José Merino
La celebración del cumpleaños de Liberación Nacional
Hasta para pleitos de los chavistas
Y ahora, hasta lugar de oraciones de grupos religiosos afines al diputado Abelino Esquivel.
Lo que me resulta extraño es que hasta ahora alguien reclama el "mal uso" del salón.
¿Nos estamos volviendo intolerantes a las manifestaciones religiosas?
En mi opinión ese salón de expresidentes en el salón "comunal" de la asamblea legislativa.
La solución liberal sería cerrarlo y ahorrarle esos costos al país, total si quieren un salón vayan y alquilen uno en otro lado, otra opción liberal sería cobrar por el alquiler y así dejamos los contribuyentes de pagar por un salón usado por grupos que quizás no sean afines a nuestras creencias.
Como sé que me van a reclamar por no tener un salón para gente pobre, entonces creo que ese salón debe estar abiertos a todos los que lo pidan mediante su diputado. Así sean, ecologistas, zurdos, feministas, bailadores y hasta grupos religiosos.
Eso es tolerancia.
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