"A medida que una discusión tica en internet o en personal se alarga, la probabilidad de que aparezca una mención a un chorizo, tiende a uno"Existe una tradición general en twitter y demás redes sociales, tales como comentarios a La Nación, de desacreditar cualquier posición contraria a relacionarla con un chorizo o ser pagado por algún poder oculto (conocido como "llamar a la gente pegabanderas").
Ampliamente utilizada por políticos como Ottón Solís y José María Villalta para desacreditar a otros partidos políticos ahora está popularizada en cualquier foro en línea.
Aunque no sólo se limita a discusiones en línea sino también a comentarios que tengan que ver con cualquier político o la labor del gobierno.
Ante este argumento no vale estudio técnico que valga, se parte de la premisa que "todo lo que venga de los políticos es corrupto excepto de mi partido o yo mismo" y por lo tanto detrás de eso hay un chorizo.